En Tamaulipas, el Bienestar se vive en los hogares y en la tranquilidad de las familias; es una política cercana y con sentido humano que reconoce a las personas adultas mayores como un pilar activo de la sociedad, portadoras de memoria, experiencia y valores, y que no solo apoya, sino dignifica y reivindica su lugar en el presente de México.
Hoy, más de 405 mil adultas y adultos mayores reciben de manera puntual la Pensión para el Bienestar, un apoyo bimestral que representa mucho más que un ingreso económico. Es dignidad, reconocimiento y justicia para quienes entregaron su vida al trabajo, a la familia y al desarrollo de sus comunidades, y también la posibilidad de cerrar el año acompañados, compartiendo con los suyos con mayor tranquilidad y certeza. Es la seguridad de que el Estado no les da la espalda en la etapa que más acompañamiento requiere.
Este respaldo social nace de una visión clara del gobierno federal. La presidenta Claudia Sheinbaum ha colocado a las personas en el centro de las decisiones públicas, impulsando una política social con sentido humano que entiende que los derechos no se administran, se garantizan. En Tamaulipas, esa visión se refleja en trabajo territorial constante y en una presencia institucional que va más allá del discurso.
Al frente de esta tarea en el estado, el delegado de los Programas Federales para el Bienestar, Luis Lauro Reyes Rodríguez, ha reiterado que fortalecer a las y los adultos mayores es fortalecer a la sociedad entera. Desde su responsabilidad, impulsa una política pública cercana, sensible y profundamente humana, donde el trato directo y el cumplimiento de los compromisos son la base para reconstruir la confianza entre ciudadanía y gobierno.
A las puertas de cerrar un año más de trabajo, Tamaulipas se fortalece con pasos firmes en la consolidación de un Bienestar que no excluye y que honra a quienes construyeron el presente y merecen vivir el futuro con plenitud, respeto y tranquilidad.
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